III) ESSAI (De 225 à 275 mots. Les candidats traiteront un des deux sujets au choix, mettront
un repère discret tous les 50 mots et indiqueront le nombre exact de mots utilisés).
1) El escritor e intelectual colombiano H. Abad Faciolince, afirmó en uno de sus artículos que
«La paz no se hace para que haya una justicia plena y completa ». A la luz de los últimos
acontecimientos ocurridos en Colombia, comente usted semejante aseveración.
2) Controlar, espiar son sinónimos de seguridad. Comente esta afirmación.
1) LA CORRECCIÓN DE ESTE PRIMER TEMA CORRESPONDE AL TRABAJO DE OCÉANE
LENAIN (PS2). ¡MUY BIEN OCEANE! ¡BRAVO! 20/20
A sabiendas de que todos los colombianos están a favor del final del conflicto armado con las
FARC-EP, lo que queda por entender son los motivos que llevaron al rechazo del acuerdo de paz el
2 de octubre pasado. Faciolince saca a la luz la piedra angular de la campaña del no: la justicia. Al
afirmar que “la paz no se hace para que haya una justicia plena y completa”, cuestiona por un lado
los argumentos del no, y por otro lado los objetivos fundamentales de la paz.
Los contrarios al proceso de paz hicieron calar hondo la idea de que las FARC no pagarían con
cárcel, ni siquiera habría sanciones, lo que creó un sentimiento de impunidad en la sociedad
colombiana. En efecto, los abanderados del no temían que la justicia transicional hiciera como si los
guerrilleros no hubieran cometido crímenes. Sin embargo, la verdad es que la justicia transicional
hace hincapié en el reconocimiento y el ofrecimiento a la verdad. Y no porque Santos no quiera
castigar a las FARC, sino porque es la única justicia que permite alcanzar la paz. Las ocasiones de
firmar dicha paz son lo suficientemente raras como para que se deba aprovecharlas, aunque la
justicia sea imperfecta.
En realidad, la justicia es un tema capital del acuerdo no solo para las FARC-EP sino también para
el conjunto de los ciudadanos. Colombia es un país donde tanta desigualdad no puede soportarse
por más tiempo. Y lo que los colombianos hubieran querido encontrar implícitamente en estos
acuerdos, era la promesa de prontas reformas sociales, una especie de justicia social concreta para
recompensarles del perdón hacia las FARC.
(doscientas setenta y dos palabras)
2) Resulta evidente que la seguridad se ha convertido en una prioridad en las sociedades
actuales. Se puede encontrar en los programas electorales de nuestros partidos políticos,
muchas veces en burda amalgama con la emigración. Se encuentra también en nuestros
barrios, ese miedo ridículo que lleva a nuestros vecinos a desarrollar tareas de vigilancia y a
instalar cámaras en todos los rincones insospechados y cuyos únicos protagonistas de estas
imágenes son topos, ratones, cucarachas y hormigas. Y es que las cámaras de seguridad se
encuentran en todos los sitios, desde los pasillos del metro hasta la puerta de la panadería de
la esquina. Me pregunto cuántas veces podremos aparecer en las grabaciones de las distintas
cámaras de nuestra ciudad en un sólo día. Pero conviene distinguir entre lo que puede ser la
protección y lo que puede ser la represión. Cuando, en nombre de la seguridad, las cámaras
captan imágenes de delincuentes o asesinos y éstas sirven para identificarlos y detenerlos, a
esto se le llama protección de los ciudadanos. Sin embargo, cuando a un individuo
cualquiera se le interviene el móvil, y se leen sus correos electrónicos, por ejemplo, me
parece una represión y un ataque a su libertad. Claramente, me refiero aquí a las
divulgaciones del informático de la NSA Edouard Snowden, a través de las cuales todo el
mundo se enteró del espionaje masivo perpetrado por los Estados Unidos bajo el pretexto
falaz de la seguridad. Incluso la canciller alemana fue objeto de semejante atentado a la
intimidad y libertad de la persona. ¿Cómo es posible que nuestros gobiernos que prometen
garantizarnos el ejercicio de nuestra libertad, la pisoteen de esta manera?
(doscientas setenta y cinco palabras)